Debido a los avances recientes en la medicina veterinaria, hoy en día hay más opciones disponibles para “esterilizar” a una mascota. La cirugía se puede realizar de un modo “abierto” tradicional o a través de medios mínimamente invasivos, usando laparoscopia. Los procedimientos que pueden realizarse incluyen una ovariohisterectomía, la extracción quirúrgica del útero y los ovarios, o una ovariectomía, cuando solo se extraen los ovarios. Todos estos procedimientos se realizan bajo anestesia general. La mayor parte de los veterinarios de atención primaria recomiendan realizar estos procedimientos aproximadamente a los seis meses de edad, pero pueden realizarse en perras de cualquier edad. Puede ser electivos o un tratamiento para una enfermedad.
Los siguientes son razones para considerar la posibilidad de esterilizar a su mascota:
- Gran disminución de las posibilidades de desarrollar cáncer mamario (de mama)
- 200 veces menos probabilidades si la ovariohisterectomía se hace antes del primer celo
- Elimina las posibilidades de presentar una infección del útero
- Elimina las conductas no deseadas relacionadas con el celo y las hemorragias asociadas
- Elimina los embarazos no deseados y los riesgos de parto difícil
La mayor parte de las mascotas jóvenes a ser esterilizadas no tienen ningún signo clínico. Sin embargo, si la mascota tiene una enfermedad del aparato reproductor, como infección del útero, parto difícil o cáncer de ovarios o uterino, puede que muestre signos asociados con esa enfermedad.
Las pruebas médicas para una ovariohisterectomía u ovariectomía de rutina generalmente son:
- examen físico completo
- las pruebas adicionales a perras más viejas pueden incluir un recuento sanguíneo completo, bioquímica en suero y análisis de orina
- es posible que sean necesarias radiografías del abdomen y, posiblemente, una ecografía en perras con infección del útero o parto difícil
Cirugía laparoscópica
Los procedimientos varían, pero normalmente se hacen 2-3 pequeñas (habitualmente de menos de 2,5 cm) incisiones en el abdomen para insertar un laparoscopio y puertos de instrumentos. Se ensancha el abdomen con dióxido de carbono y se introduce el laparoscopio para ver el aparato reproductor. Se utilizan instrumentos para agarrar y manipular el aparato reproductor, a través de los puertos de instrumentos. Se pueden ligar las venas con pinzas, suturas o un dispositivo de sellado de vasos. La ovariectomía o la ovariohisterectomía se pueden hacer utilizando este método. Después de la extracción de tejido reproductivo, se cierran las incisiones.
Cirugía abierta
La incisión quirúrgica se realiza habitualmente en la línea media del abdomen, aunque también puede hacerse por un lado. La longitud de la incisión varía dependiendo del tamaño de la mascota y otros factores. Se exponen los ovarios y/o el útero, y se atan ligaduras alrededor de las venas que suministran sangre a las partes del aparato reproductor que se van a extraer. Después de la extracción de los ovarios y/o el útero, se cierra la incisión en capas, incluida la pared corporal, el tejido subcutáneo y la piel.
Ovariohisterectomía en comparación con ovariectomía
La ovariohisterectomía ha sido el procedimiento de “esterilización” más habitual realizado en los Estados Unidos durante muchos años. Sin embargo, la bibliografía reciente ha demostrado que no hay ninguna diferencia a largo plazo en cuanto a los resultados entre las mascotas a las que se realiza una ovariectomía y aquellas a las que se hace una ovariohisterectomía. En función de esto, ambos procedimientos se pueden considerar por lo general equivalentes.
Cirugía laparoscópica
Los procedimientos varían, pero normalmente se hacen 2-3 pequeñas (habitualmente de menos de 2,5 cm) incisiones en el abdomen para insertar un laparoscopio y puertos de instrumentos. Se ensancha el abdomen con dióxido de carbono y se introduce el laparoscopio para ver el aparato reproductor. Se utilizan instrumentos para agarrar y manipular el aparato reproductor, a través de los puertos de instrumentos. Se pueden ligar las venas con pinzas, suturas o un dispositivo de sellado de vasos. La ovariectomía o la ovariohisterectomía se pueden hacer utilizando este método. Después de la extracción de tejido reproductivo, se cierran las incisiones.
Cirugía abierta
La incisión quirúrgica se realiza habitualmente en la línea media del abdomen, aunque también puede hacerse por un lado. La longitud de la incisión varía dependiendo del tamaño de la mascota y otros factores. Se exponen los ovarios y/o el útero, y se atan ligaduras alrededor de las venas que suministran sangre a las partes del aparato reproductor que se van a extraer. Después de la extracción de los ovarios y/o el útero, se cierra la incisión en capas, incluida la pared corporal, el tejido subcutáneo y la piel.
Ovariohisterectomía en comparación con ovariectomía
La ovariohisterectomía ha sido el procedimiento de “esterilización” más habitual realizado en los Estados Unidos durante muchos años. Sin embargo, la bibliografía reciente ha demostrado que no hay ninguna diferencia a largo plazo en cuanto a los resultados entre las mascotas a las que se realiza una ovariectomía y aquellas a las que se hace una ovariohisterectomía. En función de esto, ambos procedimientos se pueden considerar por lo general equivalentes.
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