El velo del paladar es una extensión de la bóveda del paladar que separa la cavidad bucal y la cavidad nasal. El velo del paladar forma un sello con la base de la epiglotis, que es un trozo de cartílago con forma de triángulo que se levanta para proteger a las vías respiratorias al tragar, de modo que los alimentos no entren en la tráquea y avancen hacia los pulmones (Figura 1). Durante el ejercicio, el velo del paladar se mueve hacia abajo y las vías respiratorias se abren para maximizar la cantidad de aire que se introduce en los pulmones. Es importante tener en cuenta que la epiglotis se asienta firmemente en la parte superior del velo del paladar para formar un sello entre las cavidades bucal y nasal, permitiendo que el caballo respire por completo por la nariz.
El desplazamiento dorsal del velo del paladar (DDVP) describe la enfermedad en que el velo del paladar se desplaza hacia arriba hasta asentarse encima de la epiglotis (Figura 2). Cuando esto sucede, el velo del paladar termina obstruyendo la abertura de la tráquea (laringe) y, por tanto, reduce la cantidad de aire que puede tomar un caballo. El DDVP se produce en la mayor parte de los casos de forma intermitente, especialmente durante períodos de ejercicio intenso y puede ser una causa de ruido respiratorio y rendimiento deficiente. Probablemente se deba a la contracción anormal de los músculos del velo del paladar y la garganta, junto con la retracción hacia atrás de la laringe, lo que provoca entonces que el velo del paladar se vuelva flácido y se desplace posteriormente sobre la epiglotis. Con menos frecuencia, problemas estructurales con el velo del paladar o la epiglotis, como quistes, tumores o deformación del cartílago de la epiglotis, generan el desplazamiento del velo del paladar, incluso cuando el caballo está en reposo. Adicionalmente, algunas enfermedades neurológicas o enfermedades que dañan los nervios que controlan la ingesta y el funcionamiento de las vías respiratorias también pueden provocar el DDVP.
Las manifestaciones más habituales del DDVP son antecedentes de intolerancia al ejercicio y ruido respiratorio superior. El ruido se produce durante la exhalación y con frecuencia se describe como un ruido de gorgoteo o vibración. Algunos caballos también pueden presentar respiración con la boca abierta cuando el velo del paladar se desplaza, dado que el aire se dirige a través de la boca durante la exhalación, en lugar de a través de la nariz. Cuando el caballo traga, la relación entre el velo del paladar y la epiglotis habitualmente vuelve a ser normal, el caballo puede luego proceder sin dificultad y el ruido respiratorio desaparece. El desplazamiento intermitente del velo del paladar es el más habitual, aunque en casos poco frecuentes puede producirse una forma de desplazamiento más permanente. En estos casos, los caballos con frecuencia tosen.
El diagnóstico de desplazamiento dorsal permanente del velo del paladar se realiza fácilmente mediante un examen endoscópico de las vías respiratorias superiores con el caballo de pie. El aspecto que se aprecia en la Figura 2 es habitual con el DDVP, con la epiglotis por debajo del velo del paladar y, por tanto, no visible.
La sospecha del DDVP intermitente más habitual, con frecuencia se basa en los antecedentes del caballo haciendo un sonido de gorgoteo característico durante el ejercicio, combinado con antecedentes de pararse durante una carrera. La mejor forma de confirmar esta enfermedad es realizar un examen endoscópico de las vías respiratorias superiores durante el ejercicio utilizando una cinta sin fin de alta velocidad o un sistema de endoscopia sobre el terreno Un sistema de endoscopia sobre el terreno tiene la ventaja de permitir observar las vías respiratorias mientras el caballo se ejercita bajo las mismas condiciones que provocan el ruido de las vías respiratorias, como durante una flexión de la testuz o al tirar de un carro. Si el velo del paladar se desplaza durante el ejercicio y no vuelve a su sitio de inmediato, puede realizarse un diagnóstico de desplazamiento dorsal del velo del paladar y pueden iniciarse los pasos para el tratamiento.
Debe señalarse que, en reposo, muchos caballos desplazarán su velo del paladar. Esto es normal, salvo que tengan dificultades para que vuelva a su posición. Además, un caballo sedado desplazará el velo del paladar, que puede permanecer desplazado durante algún tiempo. Esto no constituye la confirmación de un problema patológico.
Existen varias opciones de tratamiento del DDVP dependiendo de la causa. Si hay una enfermedad subyacente, como una lesión nerviosa o un tumor epiglótico, el tratamiento debería dirigirse inicialmente al problema principal y el DDVP podría resolverse por sí solo. Si no puede identificarse ninguna causa subyacente del DDVP, las siguientes constituyen opciones de tratamiento:
Tratamiento no quirúrgico: El estado físico es el primer aspecto que se atiende con esta enfermedad, antes de cualquier intervención adicional. El uso de un cierrabocas de la figura 8 para evitar que el caballo abra la boca y frenos como la cuchara o el freno en Z pretenden evitar que el caballo juegue con la lengua mientras hace ejercicio y, por tanto, que empuje el velo del paladar hacia arriba, llevándolo a una posición desplazada. Los sujetalenguas también se utilizan habitualmente con los caballos de carreras, como una forma de mantener la lengua en su sitio y evitar que la laringe se retraiga durante el ejercicio. Cualquier evidencia de inflamación de la faringe o las vías respiratorias superiores al realizar el examen endoscópico debería tratarse con agentes antiinflamatorios tópicos y orales.
Procedimientos quirúrgicos: Existen muchos procedimientos quirúrgicos distintos que se han utilizado para tratar y corregir el DDVP. Antiguamente se utilizaban métodos para fortalecer el velo del paladar o agrandar la epiglotis, pero ya no se recomiendan para el DDVP. Los procedimientos quirúrgicos actuales están diseñados para prevenir la retracción hacia atrás de la laringe y mantener la posición durante el ejercicio. El cirujano veterinario puede ayudarle a determinar cuál es el mejor tratamiento para cada caso individual.
- El procedimiento de Llewellyn/resección de los músculos infrahioideos/miectomía es un procedimiento que corta transversalmente los músculos que son responsables de tirar de la laringe hacia atrás. Al cortar estos músculos (esternotiroideos emparejados), la laringe se mantiene en una posición más adelantada durante el ejercicio y resulta más difícil para el caballo desplazar el velo del paladar. Esto se puede hacer rápidamente y a través de una pequeña incisión y, por tanto, con frecuencia es la primera línea de tratamiento quirúrgico.
- Avance laríngeo (Tie Forward) es actualmente el tratamiento quirúrgico más aceptado para el DDVP confirmado. Implica fijar permanentemente la laringe hacia delante por medio de dos suturas colocadas en cualquier lado de la laringe y unidas al hueso basihioides colocado más adelantado. Las suturas tiran de la laringe hacia delante, creando un sello más tirante entre la epiglotis y el velo del paladar y evitando que la laringe se retraiga hacia atrás durante el ejercicio. Se realiza habitualmente una resección de los músculos infrahioideos al mismo tiempo que este procedimiento quirúrgico.
Después de la cirugía, se mantiene habitualmente a los caballos con antibióticos y antiinflamatorios durante un breve período de tiempo, combinado con un breve período de descanso que varía de 2 a 4 semanas, dependiendo del procedimiento. Con frecuencia, los dispositivos de ayuda para el entrenamiento comentados anteriormente se incluyen en el tratamiento posquirúrgico en caballos de entrenamiento y carreras.
Esta enfermedad puede ser frustrante a la hora de corregirla y puede reaparecer incluso después de un período de éxito inicial. Esto pone de manifiesto la dificultad de conocer una causa exacta en la mayoría de los caballos que se ven afectados. Después de un examen minucioso de las vías respiratorias superiores bajo diversas condiciones, el veterinario podrá recomendar la opción de tratamiento que con mayor probabilidad tendrá el mejor impacto en el caballo.